Kenia es uno de esos países con leyes absurdas en muchos sentidos. Una de esas leyes habla de la homosexualidad, que como saben es ilegal en Kenia, como en muchos otros países. En primer lugar es una ley injusta, que atenta contra las libertades de las personas que pertenecen a este colectivo, que son muchas, pero el hablar de libertad en Kenia, es decir mucho, ya que la represión es bastante alta, tanto en Kenia como en muchos otros países donde ser gay es sinónimo de ser asesino, ladrón o alguien anormal. Estas leyes no tienen justificación y son una falta de respeto hacia el homosexual, que tiene todo el derecho del mundo a serlo.

Es sorprendente saber que la homosexualidad está penada con muchos años de cárcel, como si de un delito de tratase. El simple hecho de querer a una persona de tu mismo sexo, ya es un delito en Kenia. Seguro que todos coincidimos en que es algo lamentable aceptar que en Kenia se persigue y se castiga con cárcel la homosexualidad. Todo el que se declara abiertamente homosexual es perseguido y atacado duramente.

Es por ello que Kenia todavía sigue viviendo en el pasado, porque con actitudes de este tipo, demuestra que es un país que debe madurar y mejorar en cuanto a sus pensamientos. Me parece bastante fuerte pensar que ser un gay keniata es igual que ser un ladrón, un asesino, ya que se paga con la cárcel. Es un aspecto muy negativo y lamentable de un país como Kenia, donde las leyes injustas siguen liderando al país.