El gobierno de Kenia tomó hace algunos días la medida de obligar a todos sus ciudadanos a censar la línea de su teléfono móvil, debido a que se pretende evitar la incitación al odio racial de forma anónima a través de un teléfono móvil y por supuesto se pretende reducir el fraude, que es otro buen motivo para obligar a sus ciudadanos a censar una línea de teléfono. Los ciudadanos que queden sin aportar los datos de su móvil se exponen a castigos muy importantes por parte del gobierno.
El tiempo del que disponían se ha agotado, incluso se ha agotado el aplazamiento de una semana que finaliza durante la jornada de domingo. Es una medida dura pero que el gobierno ha tenido que llevar a cabo para evitar cualquier tipo de incidente en las próximas elecciones que Kenia vivirá en el mes de marzo y de esta forma tendrá controlada todas las líneas de teléfono móvil del país.
Para todos aquellos keniatas que decidan no censar su teléfono móvil van a exponerse a multas importantes de 2.700 euros, tres años de cárcel o simplemente la desconexión de su actual línea de teléfono. Ya en otros países se han tomado medidas similares para poder controlar la línea de teléfono que tiene cada uno y para poder disponer de todos los datos personales para evitar abusos en los teléfonos móviles. Es una medida dura pero que sin duda el gobierno de Kenia ha visto necesaria llevarla a cabo por motivos de seguridad y para evitar futuros problemas en las elecciones del mes de marzo.